Más de dos millones de personas han llenado las calles de Madrid en la convocatoria hecha por la Coordinadora Estatal de la Marcha de la Dignidad 22M. Entre las personas que recorrieron las calles de Madrid se encontraban miles de personas llegadas de todos los territorios del estado. Una parte, caminando desde el pasado día 1 de marzo, otros en los más de 900 autobuses contabilizados por los organizadores y muchos otros en transporte público o privado. Las columnas territoriales entraron en Madrid por diferentes barrios y pueblos para confluir en Atocha para iniciar la manifestación unitaria.
La manifestación estaba encabezada por una gran pancarta con la palabra dignidad en catalán, castellano, gallego, euskera y asturiano. En la pancarta iban un hombre y una mujer representando a cada territorio y una persona de las organizaciones organizadoras, entre las que se encuentra la Confederación Intersindical. Detrás iban las pancartas de los territorios, movimientos sociales, todas las mareas, sindicatos y partidos políticos. La Confederación Intersindical montó un numeroso cortejo de personas de todos los sindicatos confederados. Además tuvo una presencia notable en muchos de las columnas territoriales.
En la manifestación participarón más de dos millones de personas. Cuando la cabecera llegó a la Plaza de Colón aún había mucha gente en Atocha y una multitud en las aceras y calles laterales para poder avanzar.
La movilización ha sido un éxito tanto por la participación como por la organización. Una organización desde la base, de carácter horizontal y plural, donde todas las personas y colectivos han trabajado para garantizar el éxito de una movilización social que acabe con las políticas neoliberales de los gobiernos de la troica. Unas políticas al servicio de la minoría y de los poderosos que están empobreciendo a la población y acabando con los derechos de las trabajadoras y trabajadores y del conjunto de la ciudadanía.
Las reivindicaciones de la Marcha de la Dignidad , alrededor de las cuales se han agrupado tantos movimientos sociales, son claras: no al pago de la deuda, no a los recortes, no a los gobiernos de la troika y pan, trabajo y techo para todas y todos.También se criticó duramente la pasividad de los sindicatos CCOO y UGT, el llamado “diálogo social” y la reunión que mantuvieron con Rajoy tres días antes de la marchas.
La Confederación Intersindical valora positivamente la movilización y la manifestación del 22M y la patircipación activa de miles de trabajadores y trabajadoras y de la ciudadanía. Por otra parte, también critica la actuación de la Delegación del Gobierno de Madrid que desde el primer momento ha intentando » criminalizar » una protesta pacífica y multitudinaria. En ese sentido, considera que el despliegue policial y su actuación en la Plaza de Colón cuando el acto aún no había terminando y estaba cantando la Solfònica, es un claro ejemplo.
Finalmente, desde la Confederación Intersindical se apuesta por profundizar en la organización y estructuración del movimiento 22M para continuar golpeando a los gobiernos de la troica y para cambiar un sistema que es contrario a los intereses de la clase trabajadora.
Madrid, 24 de marzo de 2014