La Navidad trajo un nuevo regalo de Rajoy a la CEOE: El Proyecto de Ley de Mutuas.
La CEOE llevaba largo tiempo clamando contra el absentismo fraudulento y la indolencia negligente de los médicos de los Servicios Públicos de Salud en la concesión de bajas por enfermedad común. Este proyecto de Ley, aparte de un cambio en la denominación de las Mutuas (a partir de ahora se llamarán Mutuas de la Seguridad Social), de un pretendido ahorro de algo más de 500 millones por reducción del absentismo y de una mejora de la competitividad (sacrosanta palabra que justifica todo), supone que a partir de ahora las Mutuas asumen el control de todas las bajas desde el primer día, incluida la enfermedad común, la maternidad ó el accidente no laboral (esto es así si la Mutua concierta con la empresa la gestión de la incapacidad temporal por contingencia común).
Las Mutuas tendrán la facultad de DENEGAR, SUSPENDER ó ANULAR LA PRESTACIÓN ECONÓMICA sin perjuicio de los partes de alta ó baja expedidos por cada facultativo médico de la Sanidad Pública. Si la Mutua considera que el trabajador o trabajadora puede desempeñar su trabajo, tiene la posibilidad de realizar propuesta de alta al médico/a y entonces la Inspección dispondrá de 5 días para comunicar el alta ó la confirmación de la baja mediante informe justificado. Trascurrido ese plazo si la Mutua no recibe la confirmación de baja ésta puede adoptar la decisión de extinguir la prestación económica. Está claro que Inspección y facultativos de primaria, en un buen número, desistirán de realizar contrainformes de respuesta a los requerimientos de la Mutua, y aunque el trabajador/a puede recurrir ante el INSS y los juzgados (faltaría más), en la práctica cotidiana se está avanzando en la desprotección de éste.
Por otro lado las Mutuas alterarán las listas de espera para operaciones quirúrgicas, privilegiando a aquellas personas que estén de baja en detrimento de desempleados/as ó pensionistas con lesiones similares. Asimismo se les permitirá realizar conciertos con centros privados para acelerar diagnósticos favoreciendo la sanidad privada. El control de las IT servirá a su pretensión de ocultar las raíces profesionales de las enfermedades, de hecho desde el año 2006 cuando las Mutuas asumieron la gestión de la enfermedad profesional, las cifras de ésta no hacen sino reducirse.
¿Cuál es nuestra posición? La Agencia Europea de Seguridad y Salud nos dice que las causas del absentismo laboral en nuestro país provienen mayoritariamente de los trastornos músculo-esqueléticos debidos a movimientos repetitivos, sobreesfuerzos y exigentes ritmos de trabajo y los riesgos psicosociales. Es más barato investigar en estas causas y poner encima de la mesa medidas preventivas.