Un total de 8.462 altas a la Seguridad Social en los sectores de Administración, Defensa, Seguridad Social Obligatoria y 31.897 más en Educación demuestran que las Administraciones públicas han cerrado 2013 con la creación de puestos de trabajo.
Sin embargo, estas cifras, facilitadas por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, maquillan que ese nuevo empleo creado es temporal y de baja calidad. Lo que se está haciendo desde la Administración es una chapuza para cubrir las necesidades reales de empleados públicos realizando contratos de corta duración. No se puede olvidar que el Ejecutivo central mantiene la tasa de reposición cero, y no se producen ofertas de empleo público.
En este sentido, destacar que todas las nuevas altas de las de las Administraciones Públicas corresponden a personal laboral temporal, mientras que en el ámbito de la educación se deben a bajas por enfermedad y a contratos por horas.
Lo preocupante y la excepción a este crecimiento del empleo temporal es el sector de la Sanidad (8 de cada diez personas trabajan en el sector público) con el consecuente deterioro de los niveles de calidad asistencial que reciben nuestros ciudadanos.
A pesar de estos datos hay que recordar que la destrucción de puestos de trabajo públicos es tan alta que como no se detenga se va directamente hacia el colapso de la Administración. Hasta el propio ministro de Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha reconocido que desde el primer trimestre de 2011-prácticamente desde que gobierna el PP- se han perdido más de 300.000 empleos públicos.