Hace escasas fechas, Francisco Igea, a la sazón Vicepresidente, Portavoz y Consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, se despachaba con unas declaraciones en las que veía “poco probable” la implementación de las 35 horas semanales en la Función Pública y que se “estudiaría” su aplicación a lo largo de la legislatura. Asimismo cifró entre 110 y 120 millones de euros el importe que supondría dicha aplicación. La Junta de Castilla y León anda escasa de ingresos pero eso no es óbice para que hace dos semanas el consejero de Hacienda anunciase rebajas en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones y en el IRPF así como nuevas desgravaciones fiscales.
Llegados a este punto sería conveniente recordar que STACYL ya denunció esta farsa el mismo día 21 de mayo en un comunicado : ¡Ya llegan las elecciones!. Decía el comunicado:
“STACYL exige al Gobierno en funciones de la Junta de Castilla y León que deje de vender humo sobre las 35 horas para el personal empleado público de la administración regional y denuncia que los sindicatos del régimen (CCOO, CSIF y UGT) se presten a participar en la campaña electoral del PP.
El pasado 17 de mayo Junta y algunos sindicatos informaban a bombo y platillo sobre un preacuerdo que devolvería a las empleadas y empleados públicos de la Junta de Castilla y León la jornada de 35 horas a partir del 1 de junio de 2019.
Se trata de un acuerdo que carece de virtualidad, ya que los firmantes del mismo, solo se comprometen a trasladar al Gobierno que se forme tras las elecciones la necesidad de realizar las modificaciones normativas necesarias para implantar la jornada de las 35 horas antes del próximo treinta de septiembre. Se trata pues de un ruego al próximo gobierno de la Junta a que realice los cambios legislativos autonómicos necesarios en la Ley 1/2012 impuesta por el gobierno autonómico del PP en febrero de 2012 y por el gobierno estatal, también del PP en abril de 2012.
STACYL deplora que estas tres centrales sindicales, sin ningún tipo de pudor, se presten a este paripé con este gobierno del PP en funciones y le echan una manita participando en esta campaña electoral, al lado del partido sustento del gobierno que nos recortó gravemente nuestros derechos laborales y retributivos. Todo ello para tratar de atribuirse un logro, que de hacerse efectivo, será fruto de la movilización de todas las empleadas y los empleados públicos y también del trabajo de otros sindicatos con una importante representación entre los empleados públicos, en especial en educación y sanidad.”
En fin, “de aquellos polvos, estos lodos”. Nos hubiera gustado habernos equivocado en el análisis que hicimos en mayo pero lo triste es que una vez más es el empleado público de la Junta quien paga los platos rotos de la incompetencia de unos y otros.
Es momento de decir alto y claro a la Junta que estamos hartos de excusas. Es tiempo de movilización. STACYL promoverá y participará en cuantas acciones se propongan y ello sin dejar de denunciar el “seguidismo” de algunos que nos han traído a esta situación.