Sindicatos ,plataformas y personas convocan una Marcha estatal contra el paro , la precariedad ,los recortes y la represión. Varias columnas confluirán en Madrid el 22 de marzo.
La Confederación Intersindical es una de las entidades promotoras de la movilización. La idea básica es que diferentes columnas de personas salgan de varios puntos del estado para confluir en Madrid el 22 de marzo de 2014. Se pretende hacer una movilización masiva y contundente para hacer patente el rechazo del conjunto de la sociedad a las políticas sociales, laborales, económicas y de todo tipo que practican los gobiernos de la troika. Es decir, que se haga visible el gran malestar que existe en todas partes por la situación que atraviesan.
Todos y todas estamos sufriendo las políticas ejecutadas por el gobierno del PP bajo el dictado de la troika (FMI, BCE y Comisión Europea), consistentes en la destrucción de derechos y el empobrecimiento social. Estas políticas que se fundamentan en el pago de una deuda ilegítima y odiosa que no han contraído los ciudadanos, y que son el producto de la especulación bancaria y los excesos de los gobiernos neoliberales, nos están llevando a una catástrofe social.
Además, el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, con el apoyo del PP, en un acto injustificable para la mayoría de ciudadanía, modificó el artículo 135 de la Constitución para que se priorizara el pago de la deuda frente a los derechos y necesidades de las personas. Afirmaban que era la única salida a la crisis, que la política de su austeridad era la única posible, y que por tanto, era imperativo recortar el déficit por encima de los derechos del conjunto de la población. Mientras esto ocurría, no ha habido ningún recorte a la hora de inyectar decenas de miles de millones de euros para salvar a los bancos y especuladores. Los gobiernos y la patronal están aprovechando la crisis para recortar derechos y salarios y convertir una deuda privada en deuda pública. Estas políticas antisociales de recortes están causando sufrimiento, pobreza, hambre e incluso muertes y todo porque la banca y los poderes económicos sigan teniendo grandes beneficios a costa de nuestros derechos.
Por todo ello, las organizaciones impulsoras de la Marcha por la Dignidad Madrid 22M consideramos que hay que articular una movilización continuada, estable, masiva y contundente contra estas políticas que atentan contra los derechos humanos y la justicia social. Los motivos para que se produzca una gran contestación social en toda regla son de sobra conocidos. Sin embargo detectamos una creciente resignación en buena parte de la sociedad. Lo peor que nos puede pasar es que esta resignación, acabe de instalar de forma mayoritaria en la sociedad y la idea de que no se puede cambiar nada, se convierta patente para el gobierno y los poderes reales, para más recortes de derechos y libertades. La falta de medidas reales para acabar con la corrupción política , los paraísos fiscales , el fraude fiscal , la pérdida de soberanía económica … inciden muy negativamente sobre el conjunto de la ciudadanía.
Por el contrario, el gobierno aumenta el IVA; introduce el copago – repago de servicios y prestaciones básicas, se niega a introducir una fiscalidad progresiva o apostar por la creación de una banca pública. A todo esto hay que sumar las políticas de determinados gobiernos autonómicos que también recortan prestaciones, derechos , salarios y servicios públicos. Es decir, estamos, en muchos territorios, ante un doble recorte. Ante esta situación, con seis millones de personas paradas en todo el estado y un número importante de personas y familias en situación de pobreza, y ante la falta de un plan de lucha de las organizaciones sindicales mayoritarias, hay que dar una respuesta diferente a las planteadas hasta el momento. Por ello, pensamos que hay que globalizar las luchas y dar una salto adelante para frenar las políticas neoliberales y posibilitar una transformación social. La Marcha por la Dignidad del 22 de marzo pretende agrupar todas las luchas, todas las organizaciones, todas las personas que realmente estén comprometidas con la mayoría y el cambio social. No es una marcha más. Este no es el objetivo. Nuestro objetivo es poner en un compromiso al gobierno y obligarlo a cambiar o irse a casa. No estamos para más juegos florales ni por más política de salón. Ni las trabajadoras y trabajadores, ni la mayoría de la sociedad se pueden permitir el lujo de que continúe pasando el tiempo sin que haya una respuesta dura y contundente ante tanto expolio y tanta crueldad que practican los gobiernos de la troika contra el pueblo.
Motivos para movilizarnos
• Las diversas reformas laborales que están destruyendo nuestros derechos y precarizando las relaciones laborales y les ha dado un poder enorme a las patronales.
• Los recortes sociales en educación, sanidad, servicios sociales, atención a la dependencia… que afectan a la mayoría social, a los que habrá que sumar los que se anuncian para 2014.
• Las políticas de los gobiernos español y autonómicos que pretenden deteriorar para justificar el desmantelamiento y la privatización de los servicios públicos esenciales, así como de los bienes comunes.
• El desempleo que es de los más altos de Europa y que en algunos territorios sobrepasa el 30%. Además hay que sumar la creciente desprotección social de personas paradas que no cobran prestaciones, el aumento de las economía sumergida e informal y los efectos muy negativos para las personas jóvenes, las inmigrantes, las mujeres y las personas paradas de larga duración o mayores de 45 años.
• La involución en las políticas de igualdad de género por parte de los gobiernos central y autonómicos, el aumento de la violencia contra las mujeres y los graves efectos que la actual situación está teniendo con las mujeres, que agrava su incorporación al mercado laboral y cuando lo hace es en condiciones claramente discriminatorias.
• La represión en diversas formas que afecta a miles activistas sociales y sindicalistas. No conforme con esto, el Gobierno vuelve a la carga con la llamada «ley de seguridad ciudadana» y la ley de servicios mínimos.
• El crecimiento de la pobreza extrema, la exclusión y la precariedad laboral y social.
• La reforma de las pensiones que supondrá un empobrecimiento de los actuales pensionistas y que afectará, muy negativamente, los futuros que deberán trabajar muchos más años por una pensión reducida. Una reforma que profundiza en el concepto de sostenibilidad de la anterior reforma pactada por el anterior gobierno, UGT, CCOO y la patronal.
• La negativa a garantizar el derecho a la vivienda para todos y la política de favorecer los desahucios a las personas afectadas por la crisis. En este contexto hay que entender la negativa del gobierno de aceptar los contenidos de la ILP propuesta por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) a pesar de haber recogido más de 1.500.000 de firmas.
• No al pago de la deuda.
• Trabajo digno (o renta básica), casa y servicios públicos para todos y todas.